
Algunos os acordaréis: Mark Free fue la voz de aquel grupo glammy metalero llamado King Kobra que tuvo un relativo éxito en los 80. Un grandísimo cantante de poderosa voz. En King Kobra figuraban, además de Mark, el bajista Johnny Rod que acabó en WASP cuando Blackie Lawless decidió pasarse a la guitarra, así como el legendario batería Carmine Appice. Como veis, no eran unos desconocidos en la escena musical precisamente. Pero Mark tenía un problema. La verdad es que nunca se comportó como los excesivos estrellones del rock de la época, él no iba pavoneándose, no se comportaba como un león en celo como David Lee Roth. No, éste hombre iba en otra dirección. Grabó su último disco con King Kobra en el año 1986.
A mediados de los noventa, y cuando Carmine Appice intentaba convencerle para reflotar King Kobra, saltó la noticia: Mark Free, harto de esconder su verdadera personalidad, anuncia al mundo su nueva vida como mujer tras una operación de cambio de sexo, convirtiéndose en Marcie Free. Fue un poco sorprendente, porque era de dominio público que estaba casado, y sus compañeros de profesión jamás sospecharon nada es ese sentido. Dar el gran paso le liberó, atrás quedaron los años de depresión, los pensamientos suicidas, y la época más dura de su vida ( “cada día que pasaba envidiaba más a los homosexuales, ya que podían llevar una vida plenamente normal, mientras que para la sociedad los transexuales somos enfermos mentales” ).


Enfermedad mental u otra cosa análoga o paralela, porque ser hombre y sentirse mujer... esa falta de concordancia entre cuerpo y mente, es porque algo rula mal, pero que sea feliz, que es lo que importa, mientras no intenten convencernos de que es normal.
ResponderEliminar