UNMASKED 1ª Parte

La estética visual del Heavy Metal-Hard Rock ha sido siempre uno de sus sellos distintivos. Cada vez que sale la conversación sobre tal o cual banda, siempre acabamos hablando del espectáculo que dieron en esa gira que tanto recordamos, el aspecto visual que tenían en aquella época, el escenario, la vestimenta, o las portadas de sus discos. Algunos artistas incluso llegaron a inventarse sus propios personajes, con lo que el público se identificaba inmediatamente con el personaje en vez que con el artista. (fijaos por ejemplo en Iron Maiden: nombras el grupo y lo primero que te viene a la cabeza es Eddie). Para los que elegían esa vía, el uso del maquillaje y/o máscaras y demás añadidos les daba posibilidades infinitas, sobre todo en cuanto a la espectacularidad de sus actuaciones en vivo.

Ya en plenos años 70, artistas como el camaleónico David Bowie ya aparecía con su cara totalmente maquillada, a juego con el concepto del disco que presentara en tal o cual momento. The Sensational Alex Harvey Band, tenía a un guitarrista con la cara pintada de blanco como si de un mimo-payaso se tratara. A principios de los 80, gente como The Cure o Siouxie & The Banshees ya usaban el maquillaje como algo natural , e incluso fueron los pioneros de lo que ahora se ha dado en llamar “Rock Gótico”. En Estados Unidos, la Alice Cooper Band comenzaron a “teatralizar” sus shows. Su líder, Alice Cooper ya usaba su característico maquillaje, y representaban en vivo las canciones como si de una obra se tratara (horcas, guillotinas, sillas eléctricas…). Tras disolverse la banda, Alice en solitario siguió con éste concepto hasta la actualidad. En Nueva York, los macarras New York Dolls comenzaron a dar que hablar debido a su excesiva imágen, consistente básicamente en pintarse como si de putones verbeneros se tratara, aunque lo suyo era premeditado: buscar el escándalo para que se hable (aunque sea mal) de ellos.

Pero los verdaderos reyes del espectáculo maquillado fueron (y siguen siendo) Kiss. En un relato como éste son de obligada aparición. Ellos lo que hicieron fue coger las influencias que ya tenían incluso antes de formar la banda, mezclarlas con la cultura del cómic, y lo llevaron mucho más allá que sus predecesores. Ya antes de formar Kiss, cuando todavía se llamaban Wicked Lester tenían bien claro donde querían llegar, y ya salían a escena maquillados. Aunque no tenían nada que ver con el maquillaje clásico, ya despuntaban. En los primeros conciertos como Kiss, ya usaban muchos de los trucos escénicos que utilizarían durante años: Los candelabros, el fuego, la sangre… Asimismo tenían un enorme telón en forma de telaraña que era alucinante (hay alguna foto en internet), pese a su modesta popularidad, ellos ya concebían al grupo a lo grande, dándole a la gente que pagaba por verles lo que querían. Espectáculo y rock and roll. Consiguieron el megaestrellato y se convirtieron en una de las bandas estéticamente más influyentes para posteriores generaciones, desde los grupos de Black Metal (que curiosamente casi todos citan a Kiss entre sus influencias), como de las actuales hordas de Tecno-Industriales maquillados. Un clásico.


Estamos en los 80’s y el Heavy Metal empieza a arrasar en todo el mundo. Dentro de la escena inglesa, dentro de la nueva ola de metal británico, un sujeto que responde al nombre de Thunderstick comienza a tocar la batería en varias bandas (tocó con unos primerizos Iron Maiden, para acabar en Samson). Hasta ahí nada destacable… si no fuera porque toca con una malla de leopardo que le cubre el cuerpo, una máscara de cuero, y monta la batería dentro de una jaula!!! En Dinamarca opera una banda llamada Mercyful Fate, con un asombroso cantante al frente llamado King Diamond, que cuenta con con una voz imposible, y con un maquillaje y vestuario de temática terrorífico-satánica. Al igual que hizo Alice Cooper, King Diamond se lanzó en solitario estando todavía en activo en la actualidad, aunque parece ser que está bastante enfermo (ha sufrido varios infartos). En América Twisted Sister consiguieron una imagen impactante con sus pintas de macarras maquillados, al estilo de las bandas callejeras de NY. Motley Crue en esa época lanza al mercado Shout At The Devil, con una imaginería satánica (que no les pegaba en absoluto, lo suyo era sobretodo chicas, drogas, y sexo), y una imagen en la que el maquillaje, el cuero, y las tachuelas, los colocan como lo más parecido a los viejos Kiss, quizás no tanto en el maquillaje, pero sí en el vestuario. Lizzy Borden, una gran banda bastante infravalorada, heredó de Alice Cooper la teatralidad de sus actuaciones, sangre y hachas incluidas, que ha perfeccionado en al actualidad añadiendo todo tipo de máscaras y maquillaje con un resultado espectacular. Crimson Glory, otro de los grupos que mereció más suerte, saltó a la palestra con unas máscaras plateadas en su primer disco, que para el segundo se convirtieron en una especie de caretas que tapaban la cara parcialmente, y que les daba una imagen genial.


Dentro de los sonidos más duros, gente como Celtic Frost que con su imagen y maquillaje cadavérico, fue uno de los grupos que, junto a la influencia de Venom y Bathory en lo musical y Kiss en lo estético, inspiró a la primera hornada de bandas de Black Metal noruegas. El maquillaje (el denominado Corpse Paint), la estética, las portadas, de bandas como por ejemplo Dark Throne o Mayhem, las tomaron prestadas grupos que posteriormente salieron en los 90’s. Pero eso es otra historia que trataremos en la segunda parte.